domingo, 1 de enero de 2012

Tú, una forma de vida...


Una de las mejores dichas y cualidades de mi mente siempre ha sido recordar, personificar e imaginar; recordar cada detalle de un instante mágico es un deleite para mi ser, que incluso llega a estremecerse al divisar tu figura en el horizonte de mi imaginación.

Esos breves segundos en donde asfixias mi mente con tus recuerdos, son ahora un efecto secundario; me encuentro en un punto en donde no existe el retorno y la adicción parece inminente, los síntomas de cada día parecen aumentar, dejando al descubierto una alteración hasta hoy oculta que aqueja mi alma, no me refiero a una enfermedad, actitud o estado de ánimo, sencillamente he descubierto: una forma de vida.

Una forma de vida que implica mi atención y entrega de forma total, que consume diariamente una cuota significativa de sueños, ideales y suspiros de manera aleatoria, y un insistente deseo de permanecer a tu lado en nuestro paso por esta vida.

No me detendré a escribirte vagas y cursis promesas de amor, solamente me encuentro recogiendo miles de letras que han saltado de mi mente cuando no pude resistirme a pensar en ti, las cuales claramente reflejan que mi nueva forma de vida eres TÚ!